viernes, 9 de noviembre de 2007

La Paz disfrutará de siete visiones del arte colombiano




Siete pintores colombianos mostrarán su trabajo en la ciudad de La Paz. Cada uno de ellos presenta una serie en base a una temática personal.

El ser humano, la naturaleza y la guerra son las temáticas de la exposición colectiva de pintores colombianos que la Embajada de Colombia organiza en La Paz.
Cada uno de los siete artistas que participan en la muestra colectiva llegó a Bolivia con una propuesta distinta, aunque formando parte de una serie.

“Los cuadros que trajimos forman parte de nuestro trabajo actual y de nuestros sentimientos presentes. Sirven para mostrar las muchas caras que tiene Colombia”, explicó Adriana Méndez de Bustillos, quien presenta Empacado en Origen.

Para los artistas el arte es una forma de expresar los que sienten, cómo perciben las cosas y, principalmente, descubrir de nuevo su trabajo mediante los ojos de los espectadores paceños.

Cada uno de los artistas participa con cinco obras seleccionadas por ellos mismos, con excepción de Margarita Aiza, quien trajo 17 cuadros.

Aiza ofrece la serie Reclutamientos Genéricos Anónimos, una simbología dura de la guerra interna de Colombia y el efecto que tiene en la juventud.

“Mi idea es mostrar que los soldados de ambos bandos, y no sólo en mi país, son transportados a los conflictos como si fueran ganado”, explicó Aiza.

También la espiritualidad tiene un lugar preponderante en la muestra. María Fernanda Atuesta y Luzmery Loaiza presentan dos caras de este concepto.

Atuesta se enfoca en denunciar la dogmatización religiosa, que se enfoca mucho en la idea del alma e ignora al ser humano.

Loaiza, por su parte, crea criaturas, ángeles, que representan el alma del hombre. Con una visión diferente, Méndez expresa el espíritu humano y la realidad mediante los símbolos de las cajas de embalaje, que, para ella, retratan muy bien lo que sucede “dentro de uno mismo y alrededor”.

Para Emiliano Paredes y María Eugenia Ferreira es la ecología lo que inspira sus pinceles. “Es un grito de advertencia y un recuerdo de mi país lo que me motiva a retratar los humedales que cubren mi tierra”, explicó Paredes.

La exposición estará hasta el 12 de noviembre en las instalaciones de la Embajada de Colombia, ubicada en la calle Roberto Prudencio 797, entre las calles 15 y 16 de Calacoto.

TEMÁTICAS

María Fernanda Atuesta • Entre el Culto y lo Oculto, óleos.

Jorge Caicedo • Expresión, sentimiento y color, acrílico.

María Eugenia Ferreira • Visión del calentamiento global, acrílico.

Luzmery Loaiza • Ángeles, pintados sobre lienzo con óleo.

Adriana María Mejía • Mujeres, técnica mixta sobre lienzo.

Adriana Méndez • Empacado en origen. Técnica mixta.

Emiliano Paredes • Humedales. Óleo sobre tela.

Margarita Ariza • Reclutamientos Genéricos Anónimos. Óleo sobre lienzo.

http://www.la-razon.com/versiones/20071106_006082/nota_253_502815.htm

sábado, 29 de septiembre de 2007

Lo que hoy muestro… (Exposición Marzo 2005 - Galería Fábula)






Todos guardamos, sentimientos naturales y humanos que se encierran dentro de voluptuosos y fortalecidos cuerpos.
Facetas en la sombra de todos los seres humanos expresadas en una paleta gris y sombría como los sentimientos que reflejan asomándose entre trazos ágiles, inquietos e iluminados que gritan para salir de la oscuridad y del enclaustro. Facetas, momentos, sentimientos, actitudes.

Expresiones del alma que es luz que emana desde el ser interior que busca iluminar su vida y su entorno..

Adriana Méndez
Exposición Marzo 2005
Galería Fábula

viernes, 28 de septiembre de 2007

Empacado en Origen en exhibicion

La exhibición de Empacado en Origen de la artista Colombiana, Adriana Méndez estará abierta en una muestra grupal en la embajada de Colombia en Bolivia en Noviembre de 2007. (Más información será actualizada proximamente)

jueves, 27 de septiembre de 2007

Empacado en Origen










La serie Empacado en origen, de la artista plástica colombiana Adriana Méndez, nos pone frente a un hecho usualmente olvidado: en el tránsito por la vida, “venimos empacados de fábrica” y, cual empaque o embalaje de carga, se nos ha sellado y etiquetado no sólo para diferenciarnos unos de otros, sino para advertir los cuidados necesarios en su manipulación. Este hecho no deja de ser problemático porque, como lo expresa la artista, “a veces esas etiquetas sólo muestran cómo esperamos ser tratados por los demás, por la sociedad que nos rodea, y mimetizan la fragilidad de la vida que se protege en el interior”.
En su indagación de la figura humana y de la capacidad expresiva del cuerpo, la artista reconoce que “descubrí –en carne propia– la fragilidad humana muy a pesar de los fuertes embalajes que algunos decimos poseer”. Así, todos quisiéramos advertir “Soy frágil”, “Protégeme del agua”, “Este lado arriba”, “Material explosivo”, y llevar en la piel el símbolo adecuado, de aceptación y reconocimiento universal, que garantice la preservación de la vida. El riesgo que corremos todos, en la manipulación que hacen los demás de esta preciada mercancía, se evidencia en la manera como la artista se aprovecha de las texturas de los distintos materiales: Por un lado, la necesidad de expresarse básicamente con carbón, dadas las bondades del mismo, fuerte como la apariencia que queremos mostrar, y suave, frágil y quebradizo, como somos en realidad; y por otro, con el óleo que entra tímidamente –sólo lo suficiente para acompañar al carbón– y se incorpora de a uno o dos colores. Dando la atmosfera justa para dejar al cuerpo despojado de toda vanidad, enfrentado a sí mismo, conjugando así, de forma ideal, el concepto con la técnica.
En síntesis, Empacado en origen nos recuerda a nosotros mismos que, al igual que las mercancías, estamos siendo transportados de un lado a otro (¿de dónde vengo y para dónde voy?) y que a veces somos mal-tratados porque las etiquetas y símbolos de nuestra piel no logran comunicar el cuidado que requerimos.

Adriana Méndez